SANTO DOMINGO. De
niña, cuando Elisabeth Martínez iba al hospital con su madre, le decía
que quería ser una de esas personas que vestían de blanco. Cuando tenía
20 años optó por estudiar Medicina -la segunda carrera con más
estudiantes matriculados en el país- en la Universidad Autónoma de Santo
Domingo (UASD), que terminó tras siete años de esfuerzo.
-Yo
salía de mi casa con las estrellas fuera, a las 5:45, 6:00 de la mañana y
retornaba con las estrellas fuera, de noche, a las 10:30 de la noche-,
cuenta Elisabeth, que tardaba entre una hora y hora y media en recorrer
el trayecto de Buenos Aires, Herrera a la Zona Universitaria.
Ahora,
en una tarde calurosa, está sentada en el negocio familiar en el que
colabora porque, desde que terminó su pasantía en febrero pasado, han
sido infructuosos los aproximadamente 35 intentos de conseguir una plaza
como médico general en algún centro de salud. Unos 35 currículos sin
respuestas satisfactorias.
Elisabeth explica que las plazas para
médico general son pocas y que, además, está el problema de los
salarios, que al ser bajos lleva a los profesionales al pluriempleo.
-Los
sueldos también son poco competitivos. Entonces uno tiene que
distribuirse buscando por todos lados; y si uno corre con la suerte de
encontrar dos o tres trabajos en diferentes clínicas... pues uno tiene
que trabajar muchísimo, madrugar muchísimo, hacer muchos servicios para
conseguir más o menos algo que sea remunerativo para uno poderse
mantener-, sostiene la joven.
Tras graduarse, hace dos años,
Elisabeth tuvo que esperar cerca de doce meses para que el Ministerio de
Salud Pública le otorgara una plaza para realizar su pasantía
-requisito para obtener el exequátur-.
La ministra de Educación Superior, Ciencia y Tecnología
(MESCYT), Ligia Amada Melo, muestra preocupación por las limitantes de
Salud Pública para otorgar plazas para las pasantías y afirma que, como
hay muchos egresados de esa área, la cartera que dirige restringirá "un
poco" las becas de grado para medicina. La funcionaria, en cambio, pide
a los egresados de Medicina General que soliciten al MESCYT plazas para
realizar postgrados fuera del país.
Conforme al último informe
estadístico (2010-2011, publicado el 2012) del MESCYT, la segunda
carrera con mayor cantidad de estudiantes matriculados es Medicina, que
tiene 34,051 estudiantes, para el 7.83% del total de inscritos.
La
carrera con mayor cantidad de estudiantes matriculados es Contabilidad,
con 43,996 estudiantes o el 10.11% de todos los universitarios del
país.
A pesar de que esta carrera es la que tiene más
estudiantes esa es la segunda área más difícil para encontrar personal
en las empresas. Según el estudio de demanda de técnicos profesionales
presentado en febrero por la Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios
(ANJE), el 27% de las empresas tiene problemas para contratar personas
en el área de Contabilidad y Finanzas. Sólo la contratación de personal
especializado en liderazgo y habilidades directivas causa más
dificultades, al reportarla el 48% de las empresas consultadas en el
estudio.
Sin embargo, la ministra Amada Melo considera que a un
egresado de Contabilidad no le resultaría muy complicado encontrar un
medio de subsistencia en su área porque las empresas requieren sus
servicios -a veces mediante igualas- para hacer los reportes a la
Dirección General de Impuestos Internos (DGII).
El presidente de
la Asociación de Empresas Industriales de Herrera y la Provincia Santo
Domingo (AEIH), Víctor Castro, explica que las empresas necesitan un
profesional "más integral". Para el industrial, el mercado laboral busca
personal con dominio del idioma inglés y habilidades de informática,
además de las propias de su área de conocimiento, pues -dice- un título
universitario no basta. Y quizás por esto el citado estudio de la ANJE
arroja que es difícil reclutar contables.
Otras carreras con
gran cantidad de matriculados son Psicología, que tiene 30,255, para el
6.95% del total; Derecho, con 28,122 estudiantes, para el 6.46% de la
matrícula del país; Administración de Empresas, que tiene inscritas a
26,675 personas, representando el 6.13% de la población universitaria
nacional; y Mercadeo, carrera estudiada por 25,142 personas, que
constituyen el 5.78% de todos los estudiantes universitarios.
Planificación
El
MESCYT ha encargado un estudio sobre las necesidades de recursos
humanos en casi diez provincias. Cuando estén los resultados, expresa
Amada Melo, habrá una asamblea con los rectores de las universidades del
país "para que ellos reorienten su oferta académica" porque -sostiene-
desde hace mucho tiempo están insistiendo en que las carreras se
planifiquen en función de las necesidades del mercado laboral.
Ligia
Amada Melo argumenta que las universidades deben limitar las carreras
saturadas. "Derecho es una carrera que tiene que limitarse
obligatoriamente. Ya necesariamente las universidades tienen que poner
límites a esa carrera", afirma, pues, a su juicio, es la que está más
saturada.
La ministra sostiene que el MESCYT, buscando no
estimular a los estudiantes a optar por carreras de mercado saturado, no
está otorgando becas de grado para derecho, aunque sí de postgrado.
Mercadeo y Administración de Empresas también deben "limitarse un poco",
reflexiona.
Para el Secretario General del Consejo Superior
Universitario Centroamericano (CSUCA), Juan Alfonso Fuentes Soria,
cuando determinados mercados están saturados de profesionales, lo
conveniente sería guiar a los estudiantes para que contemplen carreras
que pueden ofrecer mejores oportunidades y perspectivas, pero no es
partidario de prohibir matriculaciones o cerrar carreras.
La
ministra de Educación Superior es partidaria de que las universidades
orienten a los estudiantes de nuevo ingreso, aplicando test para
determinar tanto la vocación y las aptitudes para determinada carrera.
Carreras con oportunidades
El
tercer eje de la Estrategia Nacional de Desarrollo (2010-2030) es el
referente a la economía y la estructura productiva. Sus objetivos
específicos son elevar la productividad y la competitividad de las
cadenas agroproductivas, aprovechando el potencial exportador; apoyar la
competitividad y la diversificación del turismo; elevar la eficiencia y
la productividad de las pequeñas y medianas empresas; impulsar el
desarrollo exportador y desarrollar un sector manufacturero articulador
del aparato productivo nacional, entre otras.
Aunque la
agropecuaria es una de las prioridades de la END, sólo 4,570 personas en
el país están matriculadas en ciencias Agropecuarias y Veterinarias: en
Agronomía, 3,059; en Tecnología de Alimentos, 589; en Veterinaria; 705;
y en otras 217 estudiantes.
La ministra de Educación Superior
asegura que hay muy poca demanda de becas para esta carrera porque antes
"no constituía una política de Estado el desarrollo agropecuario", pero
que ahora hay aliciente porque el gobierno busca incentivar la
agropecuaria.
Amada Melo cuenta que han ofertado un programa de
becas en una universidad en Reino Unido para estudiar Agronomía,
ciencias de los animales y energía. El MESCYT pretendía enviar unos 10
estudiantes este año, pero sólo unos cuatro han solicitado participar.
"Todavía los estudiantes no han despertado", afirma.
La ministra
opina que deben crearse más agroempresas, que otorguen un valor
agregado a los productos agrícolas. Para ella, "si el sector productivo
está lento, las universidades no se motivarían a (ofrecer) nuevas
carreras".
En la carrera de turismo -otro de los pilares de la
Estrategia Nacional de Desarrollo-hay 13,917 estudiantes, para el 3.20%.
En Hotelería hay 1216 matriculados. La ministra dice que ofertan
postgrados diversificados en el área de turismo -como Planificación e
Investigación en Turismo y en Gastronomía- no hay tanto "aliciente" para
estudiar esta carrera clave en el desarrollo del país porque los
salarios que ofrecen los hoteleros no son buenos y muchas veces importan
los recursos humanos para altos cargos.
Las carreras técnicas
Víctor
Castro sostiene que hay un "divorcio" entre la oferta de las
universidades y las necesidades del sector empresarial y del desarrollo
del país.
El presidente de la AEIH expresa que el sector padece
la escasez de técnicos, considerando que por eso están mejor cotizados
que los profesionales, y pide a las universidades no subestimar este
tipo de formación.
En este punto, la ministra Amada Melo
coincide con Castro. La funcionaria expresa que son los técnicos los más
demandados por el sector empresarial y es partidaria de que las
universidades fomenten las carreras técnicas de dos años porque
permitirían suplir la demanda laboral y que esos estudiantes tengan la
cualificación para insertarse al trabajo, pudiendo completar el nivel de
grado mientras perciben sus propios ingresos.
Para ella, en las
extensiones de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) deberían
impartir carreras técnicas para cubrir las demandas de empleados de las
empresas, poniendo el ejemplo de zonas turísticas, como Higüey, donde
la universidad estatal debería capacitar personal en Refrigeración,
Mecánica, Electricidad, entre otras áreas, pues los empresarios
hoteleros -sostiene- tienen que importar estos recursos humanos. "La
UASD es la primera que tiene que diversificarse porque es la que tiene
más estudiantes y la que tiene más extensiones", dice.
Para la
ministra, lo que las universidades deben impulsar son la Informática
-donde considera que es más fácil conseguir empleo-, las ingenierías y
las carreras técnicas. También las poco estudiadas Matemática, Física,
Química y Biología, pero dice que es difícil encontrar candidatos para
becas de especialización en esas áreas porque "todavía no hay conciencia
en el país de la necesidad de esas carreras".
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